martes, 19 de febrero de 2013

REENCUENTRO BAJO UN ESPLÉNDIDO SOL DE INVIERNO. MAULE-ATHARRATZE. DOMINGO 17 FEBRERO 2013.



Musikarekin irakurri nahi baduzu...




De nuevo nos vemos las caras en tierras suletinas después de un pequeño descanso de 3 meses, y de nuevo volvemos a trazar sobre el mapa la línea de kilómetros por lomas suaves y collados que nos acercan cada vez más a nuestro destino…

Han sido casi 21 km recorriendo bajo un espléndido día azul lomas y collados que separan  Maule de Atharratze, 2 enclaves importantes de esta bella zona de Zuberoa. Las vistas sobre las cimas nevadas del Pirineo navarro y aragonés (se divisaba el Anie y alrededores a lo lejos) nos han deleitado de forma que las cámaras de fotos no han parado de tirar y tirar instantáneas. Luego me imagino que de esta fenomenal etapa saldrán bonitas fotos para el concurso de otoño.



A las 9 y cuarto de la mañana y con bastante frío (2 grados) emprendemos la marcha por las calles de Maule, pasando por la plaza del mercado y caminando entre restos del carnaval que celebraron el día anterior. 


Poco a poco el tímido sol de la mañana nos va reconfortando y empezamos a desprendernos de la ropa de abrigo. El rocío que ha caído por la noche se va secando encima de los coches aparcados mientras vagamos entre casas de las afueras de la ciudad. 


Nos acercamos poco a poco a la primera “tachuela” del día, Matalon (439 m), y vamos subiendo y bajando lomas  hasta llegar al collado de Lexegita  (653 m), después de 3 horas por un “combinado” de pistas y pequeñas carreteras. Enseguida tenemos a la vista las antenas cercanas a la cima de Maddalen Kapera  (795 m). 



Estamos animados por el buen tiempo, se nota en el ritmo que llevamos, un poco más suave que en anteriores ocasiones, que nos permite parar a admirar el entorno. 


En los trozos de pista que hay que atravesar nos encontramos con bastante barro, resultado de los infernales días de lluvia transcurridos en lo que llevamos de año. Esta vez hemos librado un domingo (el anterior) en el que cayó lo indescriptible, ¿tocará, por fin, librar los malos y aprovechar los buenos???, las fechas están ya puestas, solo queda esperar…pero hemos empezado muy bien…



A las 13 h llegamos a la cima de Maddalen Kapera, en donde paramos un buen rato a almorzar. 


A algunos nos ha costado un poco el ascenso a pesar de que no era muy largo. El sol ya daba fuerte, y hasta este punto no había habido desnivel apenas. En la cima hay unas feas antenas que restan belleza al lugar, detalle que enseguida se olvida mirando alrededor. No dejamos de tener a la vista el recorrido realizado en la anterior etapa, las ermitas de S. Gregorio y S. Antonio en la lejanía, la selva de Arbailleta de otra etapa anterior…¡qué belleza!. 


Nos queda la última cima del día, Erretzu (700 m  ), para la que hay que descender y luego por su ladera tomar la directa a la cima. 


No nos quedará más que una fuerte bajada inicial para tomar la pista de hierba, preciosa, continuar por pista de piedra y luego llegar a la carretera vecinal que nos deja en Atharratze a las 16 h. 


En total cerca de 7 horas con las paradas realizadas para el picoteo y el almuerzo, y 1200 m desnivel.

Preciosa tierra de Zuberoa con sus iglesias trinitarias y sus pueblos atravesados por pequeños ríos. 

 
Da gusto caminar entre los prados y bosques escuchando el ruido del agua, sí, esta “otra” agua, la de las múltiples regatas que van descendiendo hasta el valle.

FOTOS DE LA ETAPA MAULE - ATHARRATZE

Etapako zuen argazkiak jarri nahi badituzue, nahikoa duzue haiek dauden helbide elektronikoa bidaltzea Posta helbide honetara. Ondoren, guk jarriko dugu.
Si queréis poner vuestras fotos de la etapa correspondiente solamente nos tenéis que enviar el enlace de dónde están a
esta Direccion de Correo. Nosotros lo pondremos a continuación. 


Fotos de ANDONIren argazkiak

Eskerrik asko laguntzagatik.
Gracias por vuestra colaboración.

martes, 12 de febrero de 2013

Entre sueños…



Suena el despertador como un martillo en mi cerebro. Como un autómata lo apago y me levanto con los ojos cerrados y pegados. En el baño me lavo la cara y me despejo “un poco”. Otro día más de trabajo, pienso, mientras me arrastro a la cocina como todos los días a preparar el desayuno. Miro por la ventana, la noche oscura me trae otro día de lluvia. Me quedo ahí, absorta, mirando el reflejo que me trae el cristal, desvencijada figura…De pronto miro el reloj y veo que es más pronto de lo normal…¡Claro, si es domingo!. Corro hacia la habitación y ahí está todo preparado para la salida, las botas con los calcetines y las polainas, la ropa de repuesto bien colocada en la bolsa con la comida, la mochila preparada con el picoteo…la cámara de fotos…

Suena el despertador, de nuevo, algo en mí ha cambiado, ¿qué he soñado?...Me desperezo después del corto sueño y como un resorte me dirijo a la cocina a preparar el desayuno e incluso canturreo en el baño…Me dirijo a la ventana de la cocina y pienso...pronto me reencontraré con la gente de nuevo en esta aventura, en este caminar por esta preciosa tierra…

                                             (MIREN MUÑOZ)

viernes, 8 de febrero de 2013

¡ Disparad, disparad, malditos !


El pasado otoño me llevé una gran sorpresa –negativa–, cuando supe de la escasa participación en el concurso fotográfico de la E.H.O. Mi perplejidad aumentó al saber que el número de concursantes alcanzó la asombrosa cifra de 5!!!  Es decir, de los aproximadamente 100 excursionistas que siguieron la travesía, tan sólo el 5% presentaron sus trabajos. ¡No me lo podía creer!

  Lo primero que pensé fue que la tradicional modestia o pudor del montañero en general a mostrar sus fotos y someterse al escrutinio de propios y extraños habría sido la causa de tan pobre representación. Pero me equivocaba. Según me contaron, la razón fundamental fue que casi nadie sacaba fotos durante las excursiones. Y me pregunto ¿cómo es posible?

  Desde mis inicios en la montaña, cuando entre toda la cuadrilla juntábamos como mucho una Kodak instamatic en blanco y negro –que indefectiblemente nos sacaba movidos–, siempre he considerado la fotografía un aliado perfecto en la montaña. Al principio, por el deseo infantil de inmortalizar nuestras “hazañas” montañeras, y más adelante para intentar reflejar nuestras vivencias y el entorno donde se desarrollan.

  No se cómo es posible pasar por los espectaculares paisajes recorridos durante la travesía y no desear retenerlos aunque sea en foto. Imágenes que nos ayudarán a conservar durante más tiempo el recuerdo de tanta belleza, los rostros de tantos compañeros, el esfuerzo de aquella cuesta, la alegría de la cima...

  Ya se que el tiempo no ha acompañado (por decirlo amablemente), y seguramente costaba sacar la cámara, pero en muchas ocasiones los días de mal tiempo dan mucho juego y permiten obtener fotos estupendas: esas nieblas que ascienden del valle, nubes imponentes, rayos de sol que se cuelan y realzan la geografía, etc., como lo demuestran las magníficas fotos que, de la mano de Andoni Ramos, Miren Muñoz y Rafa González del Castillo, ilustran y documentan este blog.

  Este año, la travesía entrará en Navarra, otro festín de paisajes que no dejarán indiferente a nadie. Es tiempo pues de preparar los aparatos fotográficos. Sobre todo hoy en día, en el que cualquier  cámara tiene calidad suficiente, y sacar fotos tiene coste cero: si salen mal se tiran a la papelera del ordenador y aquí no ha pasado nada!!

  En otoño se celebrará de nuevo el concurso fotográfico de la E.H.O.  Lo importante, como casi siempre, es participar.

Lakasta